La criatura del desván. Las primeras noticias del monstruo del desván se dieron a través de unos cuentos de terror para niños.
Cuando llegué al desván oí nuevamente el gruñido pero ahora que estuve más cerca no parecía la de un perro, se parecía a la de un león. Estuve muy asustado y no sabía qué hacer, pensé en que tal vez un león del zoológico se había escapado, estuve parado frente a la puerta más o menos por una hora sin nadie a mí alrededor, estaba muy oscuro y no se veía nada, solo se escuchaba el sonido de los gruñidos.
Cuando vi sobre la perilla de la puerta me pegue un susto enorme, tano así que caí para atrás. Me asuste porque al asomar mis ojos sobre la perilla vi directamente sus ojos junto a los míos porque aquel extraño monstruo también estaba viendo por la perilla.
Entonces recordé que sus ojos eran muy distintos a los de un león, así que abrí la puerta muy despacio pero un fuerte golpe desde dentro la abrió por completo, entonces vi que era una pequeño criatura que no daba mucho miedo pero la realidad era otra cosa, aquella extraña criatura se quería alimentar de mí, sus ojos no me dejaban de mirar, era como si me cazara con la mirada.
Entonces de un momento a otro se abalanzo sobre mí y me quiso atacar, lo patee hacia el desván y lo cerré con llave. Desde entonces jamás abrimos el desván y permaneció cerrado hasta que un incendio terrible quemo toda la casa.