El pueblo fantasmal. La noche era lluviosa; una gran tormenta caía sobre el mar. Las olas eran enormes y la niebla era espesa.
Un barco había llegado cerca de la orilla y se había separado parte de la gasolina que llevaba, de repente una gran mancha negro cubrió por completo a todo el pueblo sumergiéndola en una profunda oscuridad. Pero de repente todas las personas desaparecieron misteriosamente, no quedaba nadie, solo se escuchaba el sonido de los grillos que hacían chillar sus patas, el pueblo se convirtió en un pueblo sin gente o mejor dicho “Un pueblo fantasma”.
Pero milagrosamente sólo unas pocas mujeres y niños se quedaron allí. Los hombres y los jóvenes fueron a buscar un alimento y regresaban a ver a sus familias. Al caer la noche, otra nube negra tapo de nuevo al pueblo lo cual desapareció a las personas restantes. Desde el acantilado, la vista no era la misma, parecía que incluso la brisa había cambiado de lugar. El olor del aire y la calma del mar se habían convertido en una visión angustiosa y muy terrible. El pueblo estaba siendo destruido por esa extraña nube negra, desapareciendo toda la vida terrestre y marina.
Quedaron muchos Peces muertos flotando y todo fue devastador. Las pocas personas que quedaban, empezaron a morirse de hambre, algunos no aguantaban y se quitaban la vida. Desde entonces esa extraña nube negra que una vez extinguió por completo el pueblo no volvió a aparecer nunca más por la ciudad, actualmente nadie vive en ese pueblo.