Existía en el fondo del mar una hermosa y bella hija del rey tritón, llamada Sirenita, esta hermosa joven deseaba con ansias poder conocer el mundo de los hombres
y descubrir cada una de las cosas que habían en la superficie, como ver y oler las flores, ver el cielo, sentir el sol, oír las aves.
La sirenita ya había escuchado muchas historias acerca del mundo de los hombres, por eso tenía tantas ganas de conocerlo y de saber cómo era.
Así que un día a escondidas de su padre, decide ir a la superficie para ver una parte del mundo de los hombres, entonces ve a un apuesto y guapo príncipe del cual queda profundamente enamorada.
Siendo esta la razón por la cual decide ir donde la vieja hechicera que vive en el fondo del mar y pacta un trato con ella. La Sirenita obtendría dos piernas, a cambio que la hechicera se quedara con la prodigiosa voz de la sirenita.
Lo que la sirenita no esperaba es que la hechicera cambiara su apariencia y se hiciera pasar por una hermosa joven para impactar al príncipe, que se quedó enamorado de la bruja por su falsa apariencia.
La sirenita estaba muy triste pues tendría que hacerse parte de la espuma del mar al no ser correspondida por su amado y un día antes de la boda, las hermanas de la sirenita le dijeron que impida la boda dándole un besó al príncipe, pues era la bruja quien estaba disfrazada. Antes de iniciarse la ceremonia, la sirenita le dio un beso al príncipe y recuperó su voz, mientras que la guapa muchacha que se desposaría con el príncipe se convirtió en la temible bruja y aquella misma tarde la sirenita y el príncipe se casaron y vivieron felices para siempre.